Add parallel Print Page Options

Pero esa misma noche Dios habló a Natán y le dijo:

«Preséntate ante mi siervo David y entrégale este mensaje: “¡Tú no me construirás una casa! Desde que saqué a Israel de Egipto no he vivido en una casa, sino que he andado de un campamento a otro, y de una carpa a otra. Así ha sido hasta hoy.

Read full chapter